Una familia que estaba de vacaciones en Pinamar sufrió una grave intoxicación por monóxido de carbono
Un grave episodio se registró en las últimas horas en Pinamar donde una familia oriunda de Florencio Varela que estaba de vacaciones en la ciudad sufrió una severa intoxicación por monóxido de carbono, en el complejo “Vacances Golf”, ubicado en la calle Valle Fértil al 1300.
Según informó el portal Central de Noticias Madariaga, el lugar fue clausurado preventivamente por autoridades municipales al detectar problemas en la documentación para su habilitación. También Defensa Civil y gasistas recorrieron las instalaciones y cortaron el ingreso de gas.
Según pudo recabar el mencionado portal de noticias una mujer de 48 años denunció que se encontraba vacacionando desde el sábado junto a su esposo, sus hijos de 20 y 14 años, su nuera y una amiga de su hija en el complejo vacacional. Inicialmente se alojaron en un departamento, pero a los dos días los trasladaron a otro de mayor dimensión.
La madrugada del martes, cerca de las 5:00, todos los integrantes de la familia comenzaron a presentar síntomas como dolor de cabeza, mareos, vómitos y desmayos. La hija de 14 años llegó incluso a perder el conocimiento. La familia logró abrir puertas y ventanas para ventilar, y pidió auxilio al sistema de emergencias.
Todos los integrantes de la familia fueron trasladados al hospital de Pinamar, donde permanecieron internados durante más de seis horas bajo asistencia con oxígeno y se les realizaron análisis de sangre y orina. Los resultados confirmaron una intoxicación por monóxido de carbono.
Según el relato de la mujer, desde la administración del complejo no ofrecieron ningún tipo de asistencia ni explicaciones. Ante la denuncia, intervino la Fiscalía Nº 4 de Pinamar, a cargo del fiscal Juan Pablo Calderón, quien ordenó una investigación por “averiguación de ilícito” y dispuso la clausura inmediata del lugar.
En el procedimiento participaron personal policial, Defensa Civil, Fiscalización Municipal, Inspección de Salubridad y la empresa Proagas, que procedió al cierre del medidor central de gas con colocación de precintos. Se desalojó a todos los huéspedes y se los reubicó en otro establecimiento bajo supervisión de Desarrollo Social del municipio.
La fiscalía notificó a todos los responsables del sitio de la causa en su contra y se los citó a sedes del municipio para analizar planos y permisos.
