Le robaron la moto, la golpearon salvajemente cuando fue a reclamar y ahora vive con miedo

Soledad es una vecina de Santa Teresita quien, a través de sus redes sociales, relató la pesadilla que está viviendo desde hace algún tiempo tras ser víctima de un robo.
En su cuenta de Facebook, Soledad dio detalles de esta situación que se inició el 19 de junio cuando ingresaron a su domicilio y le sustrajeron una moto Tornado 250 color negra, luego de romper la cámara de seguridad y el portón del garaje.
Desde ese momento, Soledad comenzó la búsqueda de su moto, identificando a quiénes habrían cometido el robo. “Todos los datos que teníamos se los dábamos a la policía, averiguamos nombres, direcciones, todo”, expresó.
Sin obtener un resultado, decidieron ir a hablar con la familia de uno de los presuntos ladrones, un chico menor de edad. “Fuimos a hablar bien como gente civilizada, como adultos responsables, sabiendo que es menor, que podría ser un hijo de uno”, manifestó, pero tampoco consiguieron una respuesta.
Este reclamo se convirtió en una pesadilla hace pocos días cuando pasaron por la casa de este menor y el chico les silva por lo que decidieron acercarse al domicilio para ver si finalmente recuperaban la moto. Sin embargo, Soledad y su pareja fueron emboscados por una patota que los golpeó salvajemente a ellos y agredieron a los policías que se acercaron a auxiliarlos.
“Vinieron de sorpresa, como cobardes, una banda de más de 20 personas, a matarnos directamente a mi compañero y a mí. Habíamos ido a hablar en buenos términos nosotros. La hermana de este chico viene con un machete a amenazarme y a mi novio le pegaron con botellas. Le dieron con piedras, tenía machetes, tenía hachas, él esquivó muchos hachazos. Apreté el botón antipánico y les dije que venía la policía. Llegaron dos oficiales, pero no se podían meter porque el que se metía lo mataban, al policía también le pegaron y la oficial era imposible que se metiera porque era una locura. Me tapé como pude, pero tengo heridas por todos lados”, relató Soledad.
En medio de esta terrible situación la policía pidió refuerzos para intentar controlar la situación. “Podrían habernos matado, no paraban. Esto no puede quedar así, no puede quedar impune. Solo estábamos buscando lo que era nuestro, lo que tanto nos cuesta como a todos. Yo, por suerte, la puedo contar, pero no se puede estar así”, remarcó.